HOWE, SEAN / KADÁVER, NONO (Ilustración)
Hoy día resulta difícil no toparse con la marca Marvel. La gran popularidad de sus personajes, sus películas y su ubicuo merchandising la han convertido en uno de los mayores referentes de la actual cultura de masas. Cuesta creer que todo empezara como un entretenimiento barato para críos realizado por artistas marginados que no tenían otro modo de expresar sus historias. Trabajando desde una diminuta oficina en la Avenida Madison a primeros de los años sesenta, una editorial al borde de la quiebra presentó en rápida sucesión a una serie de personajes de coloridos disfraces que no tardaron en distinguirse por su frescura, sus defectos humanos, su épica y su sentido del humor: los Cuatro Fantásticos, Spiderman, el increíble Hulk, los Vengadores, Iron Man, Thor, la Patrulla-X, Daredevil... estos superhéroes conquistaron los corazones de los lectores y estimularon la imaginación de artistas pop, famosos intelectuales y radicales universitarios. En el transcurso de medio siglo, el Universo Marvel acabaría convirtiéndose en la ficción narrativa más elaborada de la historia y serviría como mitología moderna para