Matómelo Dumas, se lamenta ella en su habla con ecos de pasadode un dolor fosilizado, ya sin llanto, cuarenta años después de la muerte del hijo. El hijo, Evaristo Galois, que tuvo tiempo de abrazar la revolución, de sentar las bases del álgebra moderna y de perder la vida en un duelo à volonté, antes de cumplir veintiún años. Una vida, entonces, escueta y plagada de incógnitas como una ecuación quíntica: el espíritu matemático busca nos lo dice Monteserín en uno de los tantos párrafos clarividentes sobre los que se sostiene esta espléndida narración llegar al final lo antes posible, por la vía más rápida, preocupado porque a la humanidad le sobre el tiempo. Con esta novela, Pepe Monteserín vuelve a la vida un pedazo de historia apasionante, valiéndose de su potente imaginación creadora y de ese lenguaje suyo tan sólido que puede casi agarrarse con las manos. Personas, personajes. Es la potencia de la ficción. Del autor, prolífico donde los haya, dice Antonio Gamoneda: «Escritor de raza, de gran ingenio creativo, tremendo valor de sugestión. Su literatura es conmovedora, incandescente, echa chispas. con gran poder de trans. figuración de la realidad, su lenguaje es una fiesta y maravilla de la y imaginación y el léxico. Consigue hallar un espacio de adivinación, de hallazgo sin necesidad de demasiadas reflexiones. Agilidad luminosa, magnífico humor hiperbólico y burla fingida de él mismo y de sus personajes, que encubre una gravedad existencial y un acto poético de grandes dimensiones estéticas».
PEPE MONTESERÍN (Pravia, Asturias, 1952) ha publicado unos cincuenta títulos de narrativa, ensayo, teatro, guías turísticas, memorias y crónicas, así como unos seis mil artículos para el periódico asturiano La Nueva España, labor reconocida con el Premio de la Crítica de Asturias al Columnismo literario (2001), en su primera convocatoria. Además ha recibido cuatro premios más de la crítica en otros géneros, así como otros galardones de prestigio: Premio Caja España de Libro de Cuentos (1997) por Los chispazos burlones de las estrellas, Premio Nacional de Novela Francisco Ayala (1999) por Caballos de cartón, Premio Internacional de Novela Emilio Alarcos (2004) por Se detuvo el mundo, Premio de Novela Lengua de trapo (2010) por La lavandera... Donde convergen las paralelas es su quinta obra narrativa de viajes.
He comprado ese libro, el de tamaño mediano. Lo he ojeado primero y luego lo he leído, ambas con detenimiento. Es magnífico, pues ofrece láminas exquisítas, conjuntamente con textos bien detallados. GRACIAS A TASHEN POR TAN GRANDE OBRA DE EDICION E IMPRENTA.
He comprado ese libro, el de tamaño mediano. Lo he ojeado primero y luego lo he leído, ambas con detenimiento. Es magnífico, pues ofrece láminas exquisítas, conjuntamente con textos bien detallados. GRACIAS A TASHEN POR TAN GRANDE OBRA DE EDICION E IMPRENTA.