«Que este volumen salvaguarde la memoria de su magnífica labor de lector profesional, y que el ejemplo de su competencia inspire e impulse a muchos otros lectores enseñados que dan noticia del libro antes de que el libro sea noticia, para bien de eso que se ha dado en llamar cultura, y que nada tiene ni tendrá nunca que ver con la mera información. Así sea» Javier Aparicio Maydeu.En las librerías encontramos un variado repertorio de libros. Buenos, malos, excelentes, olvidables, clásicos en bolsillo, imaginativos libros infantiles y textos indispensables. Estos últimos, compañeros de viaje de miles de lectores, forman ese legado que pervive con independencia de modas editoriales y vicisitudes del mercado. Imprescindibles son aquellas obras que han cruzado la aduana del tiempo y se han convertido -gracias a lectores y libreros- en verdaderas fuentes de conocimiento. Ediciones Península propone, con esta colección, autores y materias que sugieren otras miradas, otros ángulos para acercarse a la realidad. Imprescindibles es una invitación permanente para (re)descubrir textos únicos, inteligentes y amenos de nuestro catálogo. Obras que faciliten el diálogo necesario entre el libro, el lector y el mundo. Editor, crítico, reconocido poeta, lúcido intelectual, iconoclasta y provocador, hombre de aguda sensibilidad literaria, Gabriel Ferrater, apasionado lector, dejó estas notas, informes de lectura, discretas obras maestras, donde se refleja su mirada y conocimiento sobre la narrativa contemporánea. Irónico y preciso, riguroso y jovial, los editores del mundo -agrupémonos todos- deberíamos tener a nuestra vera a Gabriel Ferrater, un Ferrater, dos, tres, capaces de aclarar nuestras dudas (nada) ontológicas y disipar nuestros miedos contables. Un Ferrater, valiente, que nos insufle el valor que -en ocasiones- hemos perdido por la presión de eso que llaman los mercados. Los editores
Gabriel Ferrater (Reus, 1922-Sant Cugat del Vallès, 1972), l'autor de Les dones i els dies (1968), va ser també un dels intel·lectuals més destacats del seu temps en l'àmbit europeu. Va practicar la crítica d'art, la crítica literària i la lingüística. Va treballar en el món editorial (com a traductor i com a lector), on es va fer un renom internacional. L'exercici de la docència universitària, en els últims anys de la seva vida, li va permetre d'ampliar la influència que havia exercit entre els seus companys de generació cap a les promocions més joves.