Treintaaños después de la aparición de su primer libro, aquel Maneras de estar soloque le valió el Premio Adonais, ofrecemos a loslectores el nuevo título de Eloy Sánchez Rosillo, Oírla luz, que llega en el momento de mayor plenitud de una dilatada, brillante ymuy reconocida trayectoria.Creemosno equivocarnos al afirmar que nos hallamos ante uno de los libros capitales desu autor. Se trata, desde luego, del más amplio y variado, y acaso del mássereno a la vez que intenso y hondo de los escritospor Sánchez Rosillo hasta la fecha. En sus páginasencontramos la transparencia, la precisión antirretórica y otros elementossingulares e inconfundibles de la obra del poeta bajo una luz distinta. Algo deello apuntaba ya con fuerza en La certeza, su libro anterior, pero en Oír laluz alcanza desarrollo completo y espléndida realización. El lamento elegíacoque impregnaba a menudo los poemas de etapas anteriores de Sánchez Rosillo desemboca ahora en una sabia y esperanzadareconciliación con el tiempo, en la que es posible percibir atisbos detrascendencia. No nos vemos ya en el desasosiego o en la angustia del devenir(antes, ahora, después), sino en la rendida aceptación del don de la vida como tiempounitario e indivisible, del que es necesario dar testimonio con gratitud.