En noviembre de 2008, mientras el derrumbe financiero global se profundizaba, la entonces octogenaria reina Isabel visitó la Escuela de Economía de Londres y sorprendió a los prestigiosos académicos allí reunidos con una pregunta inocente pero muy aguda: dada la magnitud de la crisis, ¿por qué nadie la había advertido? La pregunta fue directo al corazón de dos grandes fracasos: el del capitalismo occidental, que todavía no se ha recuperado, y el de los economistas, que no entendieron qué estaba pasando. Este libro trata sobre ese doble fracaso y propone salidas completamente innovadoras. Está claro que el sistema actual no funciona: los hogares están endeudados por no poder cubrir sus gastos básicos, el desempleo afecta cada vez a más jóvenes, se ahonda la brecha entre los que más y los que menos tienen, entre las burbujas del sector financiero y el estancamiento de la economía real. Necesitamos pensar otro capitalismo desde los cimientos, para que el objetivo no sea solo redistribuir sino crear riqueza y valor, en un ciclo virtuoso y sustentable. ¿Cómo hacerlo? Para encontrar soluciones, los autores -las y