En 1369 el rey don Pedro I de Castilla moría asesinado por su hermano bastardo, Enrique de Trastámara, que lograba así usurparle el trono. Era el final de una cruenta lucha fratricida que había teñido de sangre, intrigas y traiciones todo el reinado de aquel desdichado monarca cuya memoria, a raíz de su muerte, quedaría cubierta bajo un velo de infamias.Un acercamiento objetivo a la figura del Rey Cruel nos desvela, sin embargo, a un personaje fascinante, amigo por igual de árabes, judíos y cristianos, aficionado a la magia y capaz de entregarse a intensas y generosas pasiones, como la que vivió junto a la dulce María de Padilla.Manuel Barrios reconstruye de forma magistral la dramática vida del rey castellano, al tiempo que reivindica la figura de un personaje que supo seducir por igual a la historia y a la leyenda.
Manuel Barrios nació en San Fernando (Cádiz), realizó estudios de Derecho y es uno de los principales exponentes de la narrativa andaluza.Es autor de más de cuarenta libros y ha sido galardonado con diversos premios literarios. Entre sus novelas destacan: El crimen (finalista del Premio Nadal), Cartas del pueblo andaluz (Premio Platero), Epitafio para un señorito (Premio Ateneo de Sevilla), Vida, pasión y muerte en Río Quemado (finalista del Premio Planeta) y Al paso alegre de la paz (Premio Ciudad de Barcelona). En teatro ha cultivado el género del humor con títulos como El encierro de San Serapio, El día en que Gilda se quitó el guante, El recurso de Amparo y El otro nombre de la rosa. En el campo de la historia ha publicado, con gran éxito, El amor prohibido de Alfonso XII, Matrimonios desafortunados de la realeza española, El secreto de los jesuitas, Torquemada: inquisidor y hereje, Los amantes de Isabel II y Majas y duquesas.