En el primer libro de la argentina Yanina Rosenberg, los matices de la literatura fantástica se entreveran sutilmente con una realidad frágil, distorsionada. Todo puede quebrarse en un momento dado y será en ese instante cuando una madre reniegue de la maternidad o lo monstruoso se confunda con lo doméstico. Estas historias suman a su autora al actual auge del cuento protagonizado por escritoras.