La obra poética de Cervantes ha sido generalmente muy poco conocida y apreciada. Sin embargo, la poesía llegó a ser una preocupación fundamental a lo largo de la trayectoria literaria del autor del Quijote, que durante los últimos diez años de su incierta vida dio pruebas asombrosas de su talento literario o poético. La presente antología obedece a una selección personal de José Manuel Caballero Bonald de las poesías publicadas sueltas y de las distribuidas profusamente por las novelas y obras teatrales de Cervantes. Una recopilación necesaria, pues, como se afirma en la introducción a la presente edición, «quien fundó la mejor prosa narrativa de su tiempo no pudo ser sino un poeta». La poesía cervantina tiene algo que mantiene en vilo la escritura, que la dota de una exquisita y elegante seducción. No estaría de más olvidarse de tantas miopías críticas a la hora de revisar el mundo poético cervantino, que sin duda reserva emociones y sorpresas de muy variada lección. Como pedía Cernuda defensor vehemente de la poesía de Cervantes, «leamos ya sus versos con menos telarañas en los ojos».
El máximo representante de la literatura española nació en 1547. La cantidad de avatares que acumuló en su vida es sólo equiparable a la de sus héroes: participó en la batalla de Lepanto, donde perdió una mano