El hecho religioso en cuanto fenómeno sociocultural, objeto de las ciencias religiosas, viene cobrando una importancia creciente en las últimas décadas. Es lo que ha llevado a hablar de un retorno de la religión. La religión no sólo sobrevive, sino que irrumpe cada vez con mayor fuerza en el foro público, reclamando un puesto de privilegio como tradición sustantiva con efectos políticos, socioculturales y económicos. En este contexto adquiere nueva relevancia la pregunta sobre el papel y el significado de la religión en la sociedad actual, ante todo por lo que hace a su función ideológica, como cosmovisión de pretensión universalista, y a su función ética y humanista. ¿Puede significar la religión una instancia crítica de la Modernidad y de sus carencias o una reserva de utopías y moral? La concepción de la religión presente en la obra de Jürgen Habermas recoge muchas de las tendencias y perspectivas desarrolladas por la actual filosofía de la religión, a la vez que se esfuerza por ofrecer una alternativa a las corrientes tradicionales. Estudiar a Habermas en cuanto filósofo de la religión sirve además de hilo conductor para evaluar el conjunto de su teoría. La indudable evolución que hay en su pensamiento al analizar el fenómeno religioso refleja la transformación y ampliación de su misma concepción filosófica. Superando una comprensión sociológica, evolutiva y meramente funcionalista de la religión, ha ido progresivamente prestando mayor atención a su complejidad, y se ha sentido interpelado por aquella reflexión teológica que ha sabido integrar los contenidos de la crítica ilustrada. La doble función doctrinal y ética de la religión es asumida por Habermas desde una teoría de la comunicación que ofrece una ética sin teología, falible pero justificada argumentativamente. Sin embargo, su renovada atención al giro metafísico y religioso de Th. W Adorno y M. Horkheimer le ha llevado a escribir diversos estudios sobre la religión, el sentido, la memoria anamnética, la esperanza y el ansia de salvación, en confrontación con W Benjamin y teólogos como H. Peukert y J. B. Metz.
Array