La vuelta como género de la historia política ha rehabilitado el papel del individuo como sujeto histórico, lo que ha permitido que haya adquirido nuevo interés un género como la biografía, al presuponerse que la historia singular delimita mejor la colectiva. Pero existe otra manera de entender la biografía, que es aquella que pretende tener un mejor y más amplio conocimiento de la realidad social, a partir del estudio de biografías colectivas y del análisis prosopográfico. Un tipo de análisis que en Francia e Italia se viene utilizando con provecho para el estudio del movimiento obrero, y del que el autor se ha servido para conocer los orígenes del social-ugetismo malagueño, que fue el resultado del esfuerzo y de las luchas de cientos de trabajadores, grandes desconocidos la mayoría de ellos, y necesitados siquiera sea de algunos breves apuntes biográficos.