El museo presenta, por primera vez en España, una exposición dedicada a la faceta de Rembrandt como retratista, un género en el que el pintor más importante del siglo XVII holandés alcanzó también el máximo nivel. Junto a treinta y nueve retratos, se presentarán destacados ejemplos de otros artistas activos como él en Amsterdam durante el siglo de oro holandés, sumando un total de 80 pinturas, 16 grabados y una plancha de grabado, algunos nunca antes vistos en Europa.
Cuando Rembrandt llegó a Amsterdam a principios de la década de 1630, había ya en la ciudad retratistas como Thomas de Keyser o Frans Hals -residente en la cercana localidad de Haarlem pero con clientes en la capital-, que respondían a una alta demanda del mercado. Tras él, siguieron llegando otros, como Bartholomeus van der Helst, atraídos por las posibilidades de negocio.
La exposición, comisariada por Norbert E. Middelkoop, conservador del Museo de Amsterdam, permitirá descubrir la variedad y calidad de estas obras y familiarizarse con las historias que hay detrás de los personajes retratados: parejas casadas, artesanos trabaja