"La Habana es muy habladora. Habla todo el tiempo, pero tiene una forma de hablar que no tiene ninguna otra ciudad en el mundo. Habla de lado, como si no hablara. Larga el rumor contra las paredes, lo hace subir y bajar por las calles y cuando viene a morir en la boca de las amas de casa ya está constatado que es mentira, aunque nadie va a quitarle importancia al embuste. ¿Cuántas veces ha matado el rumor de La Habana vocinglera a Fidel Castro? Cientos de veces."
Walter Cepeda, coronel retirado de la Seguridad del Estado, recibe una llamada telefónica de su hija exiliada en Barcelona que le anuncia la muerte de Fidel Castro. Revolucionario convencido, Walter pertenece a un mundo que se está desmoronando desde hace tiempo, que ha abandonado todo idealismo para caer en la pobreza, el aislamiento y la corrupción. La noticia desata en él un torrente de recuerdos. A oscuras, en la más grande soledad y con la banda sonora enloquecedora de los ladridos de una perra llamada María Callas, el viejo coronel hace balance de los sueños y los fracasos propios y ajenos hasta componer el epitafio de una época heroica y definitivamente perdida.
Réquiem habanero por Fidel es una novela crítica, escrita con ironía e inteligencia, pero también con extraordinaria admiración por un país y por la gente que lo habita mientras espera, sin rendirse, lo que les deparará el futuro tras la última muerte de Fidel Castro.
J. J. Armas Marcelo nació en Las Palmas de Gran Canaria en 1946 y es licenciado en Filología y Literatura Clásicas por la Universidad Complutense. Reside en Madrid desde 1978. Es autor de las novelas El camaleón sobre la alfombra (1974; Premio Galdós), Estado de coma (1976) y Calima(1978), Las naves quemadas (1982) y El árbol del bien y del mal (1985) Los dioses de sí mismos (Premio Internacional de novela Plaza & Janés 1989; Alfaguara, 1996), Madrid, Distrito Federal (1994; Alfaguara, 1999), Los años que fuimos Marilyn (1995), Cuando éramos los mejores (1997), Así en La Habana como en el cielo (Alfaguara, 1998) y El Niño de Luto y el cocinero del Papa (Alfaguara, 2001).
Armas Marcelo colabora habitualmente en prensa, radio y televisión. En 1998 obtuvo el Premio González-Ruano de Periodismo y, desde ese mismo año, está en posesión de la Orden de Miranda