Lo andaluz es fácil de percibir, pero enormemente difícil de definir. Ello explica que coexistan los que niegan la existencia de Andalucía con quienes la definen de maneras contrapuestas. Manuel Clavero mantiene que Andalucía tiene una identidad extraordinaria que deriva de su excepcional situación geográfica, puente de continentes y mares, y de su singular historia. Los andaluces han sido colonizados en reiteradas ocasiones y han sido colonizadores en América. Esa convergencia de culturas, por asimilación y absorción, ha ido cuajando lo andaluz. Para los andaluces, lo cultural, histórico y geográfico está por encima de las cuestiones étnicas o el derecho propio, tan reclamadas en otras geografías con acendrados nacionalismos. Sin embargo, mantienen una identidad fácilmente percibible por quienes nos visitan. La Unidad de Andalucía coincide con los momentos de su grandeza histórica y la división de su territorio con los de su decadencia. Han existido diversos intentos de búsqueda de la unidad perdida y Clavero los estudia, desde la conspiración del duque de Medina-Sidonia y del marqués de Ayamont