El interés por la técnica Bowen ha crecido considerablemente durante los últimos años. Es una técnica originaria de Australia que se basa en un tratamiento de imposición de manos. El terapeuta pone los pulgares o los dedos en determinados puntos del cuerpo y realiza un movimiento específico sobre los tejidos blandos -músculo, tendón, ligamento- y entre cada serie de movimientos abandona la habitación para permitir que el cuerpo responda. Los movimientos son suaves y el cliente no debe sentir mucho dolor durante el tratamiento, aunque puede haber unas zonas más sensibles que otras. Además, el terapeuta realiza muy poco esfuerzo físico, por lo que esta técnica supone una alternativa ideal para tratamientos más físicos, ya que no requiere casi fuerza.Este libro presenta los principios de la técnica Bowen y explica lo que se consigue al implementarla. Julian Baker se formó rigurosamente en la técnica Bowen cuando vivía en Australia, tras quedar impresionado por un tratamiento muy exitoso que le realizaron para curar una lesión aguda en el cuello.