La teoría del majarón malagueño es una reflexión humorística sobre Málaga y sus habitantes. Málaga es una ciudad poliédrica, es decir, complicada a más no poder, y también lo son los malagueños. por eso, ni siquiera cuenta con un único tipo de malagueño tópico, cuenta con tres. Para el autor, lo más característico de Málaga es que ofrece al mundo tres gracias (tres ´tipologías´, como dicen los sociólogos con deformación profesional) que nadie quiere admitir como propias: el ´majarón´, el ´merdellón´ y el chusmón. La voz majarón, del árabe mahrum (desgraciado) describe a esos miles de malagueños a los que les falta un tornillo, incluso si esta ausencia no ha sido detectada por la Ciencia, pero que sí ha confirmado la sabiduría popular. Generaciones de majarones ilustres han forjado la que Aleixandre llamó la Ciudad del Paraíso, convirtiéndola en un rincón cosmopolita en el que lo racional y lo irracional conviven en un asombroso equilibrio. Málaga, capital económica de Andalucía, no habría sido nada sin los merdellones, cuyo ejemplo más famoso es el nuevo rico malagueño, pródigo en excesos verbales y ornamentales. La tercera figura, el chusmón, es la más injustamente tratada, abundando como abunda en todos los barrios de Málaga. Nos referimos a esos jóvenes y adolescentes que exhiben su capacidad de sudoración en la Feria de Málaga, mostrando las carnes, y que campean por la ciudad en coches con una discoteca cañera incorporada. En la segunda parte del libro, el autor aborda los rasgos y símbolos que mejor definen a los malagueños: la Feria de Agosto, la Semana Santa, la Málaga cosmopolita, la resurrección de Picasso, los roces con Sevilla, la ciudad que da la espalda al mar, la sobreexplotación urbanística Una oportunidad de conocer, con ironía, las luces y sombras de una ciudad contradictoria que, puesta en la balanza, desprende luz y dinamismo a raudales.