Todo el mundo parece tener claro lo que significa el terrorismo en la actualidad. Sin embargo, pese a lo conocido y repetido por los medios de comunicación, este fenómeno hunde sus raíces en problemas mucho más lejanos y complejos que los conflictos políticos y económicos internacionales o en la aparición de epifenómenos puntuales como Al-Qaeda. Eagleton, uno de los críticos culturales más prestigiosos del momento, repasa esta idea de terror hasta encontrar el fundamento y origen en la cultura clásica, en la respuesta de los poderes oficiales frente a las minorías, en la satisfacción y el gusto por la santidad o la inmolación recogida por la cultura clásica y en otros aspectos cruciales de la evolución de la idea de cultura que hacen de esta "enfermedad política y social moderna" un continuum en la historia de la humanidad.
De las "orgías de sangre" tradicionales en la historia de la cultura (Dionisio, Shakespeare) hasta los suicidas de Oriente Medio como expresión final y última de la idea de martirio, el libro sorprende al aportar una visión radicalmente diferente del fenómeno terrorista.
Terry Eagleton (Salford, 1943) crítica literario inglés y titular de la cátedra John Edward Taylor de filología inglesa en la Universidad de Manchester y miembro de la Academia Británica. Doctorado en el Trinity College de Cambridge, obtuvo la cátedra de Teoría cultural de la Universidad de Manchester.
Discípulo de Raymond Williams, Eagleton empezó sus estudios culturales, de enfoque marxista, analizando la producción literaria de los siglos XIX y XX. En los años sesenta formo parte del grupo de intelectuales católicos de izquierdas, Slant surgido entorno a una publicación del mismo título de la Universidad de Cambridge donde colaboraba con Herbert McCabe y Dennis Turner.
Autor de veinticinco títulos, sus tesis se mueven entre la teología y el psicoanálisis, Eagleton siempre ha sido un gran valedor de las tesis de Zizek en el Reino Unido. En estos títulos se puede ver el rechazo de Eagleton a al estanca categorización de la posmodernidad, a pesar de abogar por la interdisciplinariedad de vasos comunicantes abiertos.