(Dublín, Irlanda, 1935) es profesor de Historia en la Universidad de Princeton. Su obra abarca
desde el análisis del culto a los santos, pasando por su célebre biografía Agustín de Hipona (que escribió a los 32
años, y actualmente sigue siendo un texto de referencia), hasta una nueva interpretación de la Antigüedad Tardía que
subvierte la difundida tesis de la decadencia del Imperio Romano acuñada por el historiador Edward Gibbon. Su erudición,
su rigor y su sensibilidad le han convertido en uno de los historiadores más sobresalientes y singulares.