1. Gulags en la Unión Soviética
2. Retornos a Moscú: Vida después de Stalin
3. Reencuentros familiares en el Moscú post-Stalin
4. Trayectoria del personaje Iván Grigórievich
5. Impacto del totalitarismo en la libertad individual
6. Descripción de la sociedad soviética en la obra de Vasili Grossman
7. Reflexiones sobre la tragedia y la libertad en el siglo XX
8. Miserias de la condición humana en "Todo fluye" de Vasili Grossman
9. Crítica de los totalitarismos en la narrativa de Grossman
10. Libertad como valor supremo en la literatura de Grossman
Stalin ya no está entre los vivos. En 1954, después de tres décadas preso en campos penitenciarios, Iván Grigórievich regresa a Moscú para comprobar que la vida allí ha seguido sin él. Desde el desangelado reencuentro, cargado de contención y culpa, con su primo Nikolái, un científico que siempre se ha mantenido fiel al Partido, o el paseo por el lugar donde vivía la mujer a la que amaba, Iván toma conciencia de la magnitud de la tragedia: la libertad no sólo ha sido asesinada en la política, sino también en la agricultura, en la filosofía y, sobre todo, en el alma de los rusos. A través de la voz del protagonista, Vasili Grossman se adentra en uno de los períodos más oscuros y trágicos del siglo XX, una época que empieza con Lenin, sigue con Stalin y termina en ese destino que nace de los huesos de una generación perdida. Una novela excepcional que además de retratar las miserias de la condición humana, es un grito contra el sinsentido de los totalitarismos y la afirmación de que la libertad es el bien más preciado del hombre. Vasili Grossman terminó el manuscrito de Todo fluye poco antes de morir, creyendo