La traducción no sólo me parece la más completa y mejor de todas las lecturas sino también la única posible, porque traducir es una operación mental combinatoria que exige tanto metaphora como hermeneia: tanto transvase lingüístico como continuas apuestas por una u otra interpretación No puede darse lo uno sin lo otro, y han de realizarse ambas cosas juntas y a la vez.
Jaime Siles nació en Valencia en 1951 y estudió en la Universidad de Salamanca, Tubinga y Colonia. Ha sido catedrático de las universidades de La Laguna y St. Gallen (Suiza), profesor invitado en las de Viena, Salzburgo, Graz, Turín, Bérgamo y Ginebra, así como en la de Madison (Wisconsin), y en la actualidad lo es de Filología Latina en la de Valencia. Autor de ensayos como El barroco en la poesía española (1976), Mayans o el fracaso de la inteligencia (2000) o Más allá de los signos (2003), y traductor de Paul Celan, Wordsworth y Arno Schmidt, su obra poética incluye títulos como Canon (Premio Ocnos en 1973), Música de agua (Premio de la Crítica del País Valenciano y Nacional de la Crítica de 1983), Semáforos, semáforos (Premio Fundación Loewe en 1989) e Himnos tardíos (Premio Internacional Generación del 27, 1999). Recientemente ha publicado, junto con José María Micó, la antología Paraíso cerrado: poesía en lengua española de los siglos xvi y xvii (2003). En 2003 recibió el Premio Teresa de Ávila por el conjunto de su obra. Sus obras han sido traducidas al alemán, al italiano y al francés.