Fue el año en el que se contó toda la verdad sobre la llamada «tragedia de los Andes», aquel accidente aéreo cuyos supervivientes hubieron de devorar los cadáveres de las víctimas para no morir de hambre. Fue también el año en el que Franco recibió en el Pardo al boxeador José Legrá, y en el que Esperanza Roy todavía era vedette de revista, y los carteles con su fotografía de cuerpo entero nos encandilaban desde las fachadas de los teatros. Fue el año, en fin, en el que el niño protagonista de esta novela se rompió la mandíbula y le dijeron que le tendrían que aplicar la misma cirugía con la que le habían curado una lesión similar a Cassius Clay. Los niños jugaban con mádelmans y leían el Pumby. Y todos deseaban tener una bici plegable, como la que inicia la serie de acontecimientos que culminan en estas Vacaciones de invierno.
José Manuel Benítez Ariza (Cádiz, 1963) es autor de las novelas La raya de tiza (Pre-Textos, Valencia, 1996) y Las islas pensativas (Pre-Textos, 2000) y de los libros de relatos La sonrisa del diablo (Renacimiento, Sevilla, 1998), El hombre del velador (col. Calembé, Ayto. de Cádiz, 1999) y Lluvia ácida (Algaida, Sevilla, 2004). Su obra poética se ha reunido en Casa en construcción (Renacimiento, 2008) Mantiene una columna semanal en Diario de Cádiz y hace crítica de libros para el suplemento El Cultural del diario El Mundo. Con Sexteto de Madrid y otros cuentos Benítez Ariza demuestra una vez más su maestría narrativa y su pasión por la literatura para el lector de a pie.