El viaje de Marco Polo a los confines del continente asiático fue la mayor aventura fabulosa de la Edad Media. Y es que de «fábula», cuando no de invención embustera, la trataron los contemporáneos cuando la leyeron.
En este libro, Marco Polo nos muestra un abanico de «rarezas» maravillosas que conoce en su interacción con los mongoles y los chinos. Relata las costumbres del mundo oriental; nos describe y conduce por los paisajes silenciosos del Pamir, los verdes valles de Afganistán o las noches en los contrafuertes del Tíbet; y nos acerca a sus cuentos y leyendas, muchos de los cuales aparecerían en «Simbad el Marino» y en «Las mil y una noches». Estas memorias son, ante todo, recuerdos y apuntes sobre las tierras recorridas, más que testimonio de actividades propias; Marco Polo entonces no es un protagonista, sino que se convierte en testigo de lo que refiere, regalándonos un viaje maravilloso.
Marco Polo (c. 1254-1324) fue un célebre viajero y mercader. Nacido en la entonces República de Venecia, su celebridad se debe mayoritariamente a los múltiples relatos que se le atribuyen narrando sus viajes a Asia Oriental, y que dieron a conocer estas lejanas tierras en la entonces ignorante Europa. Sus viajes fueron una inspiración para muchos otros viajeros posteriores, como Cristóbal Colón.