GOETHE, JOHANN WOLFGANG VON / GOETHE
Werther es un joven vitalista al que le apasionan los espectáculos naturales, los niños como representación de un futuro prometedor y los poemas de Homero y Ossian. En su retiro en un pequeño pueblo alemán conoce a Lotte, de la que no tarda en enamorarse, a pesar de que ella está ya prometida. La aparentemente sencilla historia de amor que se nos relata en Las penas del joven Werther se transforma, en manos de un genio como Goethe, en una innovadora obra de arte, toda una declaración de principios en contra de las normas establecidas y en la que se nota la clara voluntad del autor de romper las fronteras del lenguaje y con la tradición literaria anterior. Inmediatamente después de su publicación, la novela sacudió los cimientos de la cultura europea, se convirtió en punta de lanza del movimiento romántico al que precedió e hizo de su protagonista el modelo de toda una generación de jóvenes.
JOHANN WOLFGANG GOETHE (1749-1832) fue un hombre de saber enciclopédico, que con su vasta obra, que abarca desde poesía hasta tratados científicos, rompió con la encorsetada tradición de la Ilustración y abrió las puertas al movimiento romántico. Tras pasar su infancia y adolescencia en Fráncfort del Meno arropado por una familia de cierto estatus social y político, se trasladó primero a Leipzig y luego a Estrasburgo para estudiar Derecho. Durante su etapa universitaria, Goethe empezó a escribir. Se inició con la poesía, pero no se limitó a ella, también hizo incursiones en el ensayo y en el teatro (Götz von Berlichingen, 1771), y colaboró con una revista de su ciudad natal. En 1774, en apenas un mes, escribió Las penas del joven Werther. . Al año siguiente de su Werther el duque Carlos Augusto de Sajonia le invitó a que se estableciera en la corte de Weimar, donde ejerció diversos cargos a lo largo de su vida. Goethe fijó su residencia definitiva en Weimar, aunque realizó constantes viajes, el más largo de ellos el de dos años (1786-1788) que le llevó a diferentes ciudades italianas y durante el cual escribió los dramas Ifigenia en Táuride, Egmont y buena parte de Torquato Tasso. También durante su larga estancia en Italia empezaría a trabajar en su Fausto, obra cumbre de la literatura universal, cuya gestación se prolongaría prácticamente hasta el final de su vida (la primera parte vio la luz en 1806 y la segunda en 1831, un año antes de su muerte). Entre sus obras posteriores destacaron sobre todo sus novelas Años de aprendizaje de Wilhelm Meister (1796), Germán y Dorotea (1798), Las afinidades electivas (1809) y Años de peregrinaje de Wilhelm Meister (1821