Seiobo, una deidad japonesa que tiene en su jardn un melocotonero que florece cada trescientos años y cuyo fruto da la inmortalidad, decide volver a la Tierra en busca de un atisbo de perfección: la belleza, por fugaz que sea, revela lo sagrado, que a me
László Krasznahorkai, Gyula (Hungría) 1954, recorrió durante años el país después de estudiar en Budapest y ejerció diversas profesiones en pueblos y ciudades de provincias. Ha publicado, además de Melancolía de la resistencia (Acantilado, 2001), con la que se presentó a los lectores en lengua española, Al Norte la montaña, al Sur el lago, al Oeste el camino, al Este el río (Acantilado, 2005), Guerra y guerra (Acantilado, 2009), Ha llegado Isaías (Acantilado, 2009), Tango satánico (1985), Circunstancias de gracia (1986) y El prisionero de Urga (1992). Varias de sus obras han sido llevadas al cine. En marzo de 2004 recibió del gobierno húngaro el Premio Kossuth, uno de los más prestigiosos de su país, por el conjunto de su obra.