Los recientes descubrimientos revolucionarios en el campo de la neurociencia y la psicología del desarrollo han modificado nuestra comprensión del desarrollo infantil. Todo lo que el bebé experimenta en el útero materno y después, tras el nacimiento, deja una huella indeleble no sólo en su cerebro, sino también en el sistema inmunitario y en todo su organismo. Todas sus experiencias, desde el momento del parto hasta una tarde en un parque modelan la salud y la personalidad de los niños. El doctor Thomas Verny esboza aquí un mapa de las influencias que intervienen en el desarrollo mental y emocional del niño, desde que es concebido.