No es fácil escribir sobre Maurice Blanchot, dice Lévinas del amigo al que permaneció unido desde que, en 1923, se encontraran en Estrasburgo. Estos ensayos sobre Blanchot son así la expresión misma de una amistad que fructifica doblemente en una de las aventuras intelectuales más fascinantes del siglo XX. La literatura y la filosofía, la decadencia de la metafísica y el ocaso interminable de la poesía son los horizontes hacia los que se orienta una experiencia de la escritura que desborda los cauces por los que ha discurrido el mejor pensamiento moderno, de Hegel a Heidegger.
Emmanuel Levinas nació en Kaunas (Lituania) el año 1906. Estudió filosofía en la Universidad de Estrasburgo (1923-1928) y fenomenología en la de Friburgo, donde conoció a Husserl y a Heidegger. Nacionalizado francés en 1930, escribió «La teoría fenomenológica de la intuición» con el fin de divulgar el pensamiento de Husserl. Tras la Segunda Guerra Mundial, la mayor parte de la cual estuvo prisionero, frecuentó círculos filosóficos de vanguardia como el de Marcel y el de Wahl. A partir de los años 50 del siglo pasado elabora su filosofía ética más original. Influido por las filosofías dialógicas de Rosenzweig y Buber, redacta «Totalidad e infinito» (1961), cuyas intuiciones reelabora en «De otro modo que ser o más allá de la esencia» (1974), sus dos principales aportaciones al debate metafísico. Entre sus obras también destacan «Cuatro lecturas talmúdicas» (1968), «Du sacré au saint: cinq nouvelles lectures talmudiques» (1977), «LAu-delà du verset: lectures et discours talmudiques» (1982), «En la hora de las naciones» (1988), y «Nuevas lecturas talmúdicas» (1996). Levinas murió en París, el 25 de diciembre del año 1995.