Los " Milagros de Nuestra Señora " fueron escritos hacia mediados del siglo XIII. Esta obra se inscribe en una extensa corriente de literatura de milagros marianos que circulaba por toda Europa, tanto en latín como en lenguas romances. Para componer la obra Berceo se inspira en una colección de milagros escritos en latín, pero, al hacerlo, su personalidad queda al descubierto en la cuidada reelaboración de las fuentes y en la atención que presta al público al que la obra está dirigida.
Gonzalo de Berceo (1198-1264?) nació en el pueblo denominado Berceo, aledaño a la abadía de San Millán de la Cogolla, a finales del siglo XII. Se trata del primer poeta de renombre en lengua castellana, además de uno de los mayores representantes del mester de clerecía. Se podría afirmar que su obra es un fresco de grandes proporciones, con un toque rústico y un admirable candor, inconfundibles ambos. Su obra capital, Milagros de Nuestra Señora, da buena cuenta de su originalidad y notoriedad. Fue ordenado sacerdote en el mismo monasterio de San Millán de la Cogolla, donde ejerció los cargos de diácono y presbítero, hasta su muerte, acaecida hacia 1264.