En estos tiempos en los que conocemos todo tipo de detalles sobre atentados y catástrofes que generan víctimas en número considerable no existen trabajos que aborden de modo directo el tratamiento de las mismas. Este libro ofrece una orientación para el tratamiento de víctimas de sucesos traumáticos, personas que en un instante perciben como se colapsa su seguridad y su mundo, añadiendo su quiebra física y psicológica. Relata la intervención en el atentado terrorista del 11 de marzo en Madrid. Se enmarca en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón, que atendió al mayor número de heridos y familiares, víctimas secundarias. La situación que se dió inmediatamente después del atentado supera cualquier otra intervención, por número de víctimas y la amplitud del área afectada. Con el fin de llevar a cabo la tarea de atención psicológica se activó un grupo de intervención formado por 40 personas, todas ellas con experiencia en tareas asistenciales. La fecha del atentado de Madrid es recordada por unas siglas (11M) como ocurre con New York o Londres. Mucho se ha escrito sobre lo sucedido, en todo tipo de publicaciones y formatos. También se han publicado datos, casi siempre estadísticos, que aportan conocimientos útiles para desarrollar estrategias generales, pero no para el tratamiento de las personas afectadas en situaciones excepcionales como la que aquí se expone. La experiencia vivida aquellos días tiene la relevancia suficiente para hacer una narración sobre la misma. En un primer momento todos fuimos víctimas, pero aplicando la misma filosofía que se encuentra en la base de este trabajo, es más positivo aprender de la tragedia, sobre todo si sirve para aliviar situaciones límite con un método de trabajo que ha demostrado su utilidad según el testimonio de los propios afectados. Ellos son los principales protagonistas de este trabajo, al igual que lo son dé sus vidas al día de hoy, lo que hace que este libro sea diferente. Todo su contenido es práctico, real, lo que pasó y lo que se vivió, sin adornos. Y puede ser una guía que oriente a aquellas personas que han de afrontar tareas de ayuda, ya que se sigue. paso a paso, cada situación, su planteamiento y abordaje. La intervención tiene dos objetivos fundamentales: que las víctimas dejen de serlo y que la ayuda acabé siendo innecesaria.