Lucas, un anciano que vio la guerra, no le gustó y prefirió trabajar de carpintero pensando que algún día tendría que viajar al Himalaya. Marcos, un okupa que no quiere buscar nada y encuentra de todo. Y María y Roma, peculiares mujeres que pudieron viajar a París y eligieron quedarse aquí, con nosotros. Esta novela es el lugar de encuentro entre la juventud y la vejez, un espacio lleno de humor, ternura, sabiduría y asombro.
Nació en Algorta, Getxo en 1973. De formación filólogo y de oficio traductor, es también colaborador en la prensa escrita. Su novela Un tranvía en SP (2001) recibió el Premio Nacional de Narrativa 2002 y cosechó un gran éxito de público y crítica.
Las orejas de los saltamontes es su primer libro infantil pero no el último. Acaba de publicar en euskera Zizili, que todavía no ha sido traducido al castellano.