«Con mucha humildad escribe Neruda, hice estos sonetos de madera, les di el sonido de esta opaca y pura substancia». En los Cien sonetos de amor Neruda habla para Matilde Urrutia. Sin embargo, el amor al que rinde homenaje es para el poeta no so´lo el cuerpo amado sino tambie´n la vi´a de acceso que permite reconocerse en el ser del mundo.
Pablo Neruda, nacido y muerto en Chile (Parral, 1904-Santiago, 1973), ha sido sin duda una de las voces más altas de la poesía mundial de nuestro tiempo. Desde el combate directo o desde la persecución y el exilio valerosamente arrostrados, la trayectoria del poeta, que en 1971 obtuvo el Premio Nobel, configura, a la vez que la evoluciónde un intelectual militante, una de las principales aventuras expresivas de la lírica en lengua castellana, sustentada en un poderío verbal inigualable, que de la indiscriminada inmersión en el mundo de las fuerzas telúricas originarias se expandió a la fusión con el ámbito natal americano y supo cantar el instante amoroso que contiene el cosmos, el tiempo oscuro de la opresión y el tiempo encendido de la lucha. Una mirada que abarca a la vez la vastedad de los seres y el abismo interior del lenguaje: poeta total, Neruda pertenece ya a la tradición más viva de nuestra mayor poesía.