Zenobia Camprubí llevó a cabo un Diario a lo largo de los casi veinte años que duró su vida en el exilio. Redactado parte en inglés y parte en español, lenguas que por sus antecedentes familiares y trayectoria personal dominó con idéntica facilidad, el Diario nos revela el carácter extraordinario de quien fuera la esposa del poeta Juan Ramón Jiménez. Entrelazados con la vida activa de su autora, se recogen en este monólogo sus estados de ánimo, los de su marido. sus frustraciones y ambiciones, sus reflexiones respecto al poeta y a su entorno. El Diario destaca por su valor como obra intimista, lo que pone de manifiesto la competencia literaria de la autora, y su importancia como testimonio histórico y documental. Si un diario conecta las dos partes del ser, la que escribe y la que lee, y ese vínculo se convierte en un modo de observar la propia supervivencia, el Diario de Zenobia Camprubí sería, como se observa en el prólogo del primer volumen, «un instrumento de supervivencia por el que Zenobia trató de reencontrar el perdido sentido de la vida a raíz del trauma de la Guerra Civil española». El primer volumen abarca el periodo comprendido entre 1937 y 1939, correspondiente a la estancia del matrimonio en Cuba. el segundo cubre los años que van de 1939 a 1950, los vividos en Estados Unidos. el último, hasta ahora inédito, se centra en los años finales de su vida, transcurridos en Puerto Rico. Alianza Literaria aborda la publicación del Diario de Zenobia Camprubí junto a La Editorial, Universidad de Puerto Rico. La edición y preparación de este diario completo ha estado a cargo de Graciela Palau de Nemes.
Fue mucho más que la abnegada esposa de Juan Ramón Jiménez. Mujer culta e inquieta, residió en Estados Unidos (1904- 1909) donde comenzó su Diario de juventud, antes de casarse con el futuro Nobel en 1916. Se distinguió por su carácter emprendedor y por su compromiso en causas sociales, humanitarias o relacionadas con la emancipación femenina. En su obra literaria destacan las traducciones de Rabindranath Tagore, textos como Juan Ramón y yo (1954) o tres volúmenes de Diarios correspondientes a los años de Cuba (1937-1939), Estados Unidos (1939-1950) y Puerto Rico (1951-1956), a los que se suman un cuarto y anterior, fechado en 1916, y otros escritos o traducciones ahora recuperados que se sirven tanto de la lengua española como de la inglesa.