Floreana, una historiadora aún más joven y más atractiva de lo que ella misma quiere creer, llega a un albergue muy particular en la isla de Chiloé. Allí, en medio de los paisajes del sur profundo, acuden mujeres diversas para curar las heridas de un dolor común: el desamor de los hombres. Ambivalentes, reprimidos en el sexo, vacilantes en el compromiso amoroso, los hombres sienten miedo frente a la autonomía que las mujeres han ganado. Mientras tanto, en ellas crece la insatisfacción, el «mal femenino» de este fin de siglo
Marcela Serrano (Santiago de Chile, 1951). Licenciada en grabado en la Universidad Católica, desarrolló su carrera profesional entre 1976 y 1983 en diversos ámbitos de las artes visuales, con énfasis en instalaciones y acciones de arte (entre ellas el body art). Ha publicado tres novelas, que suman ya numerosas ediciones. Nosotras que nos queremos tanto (1991) fue galardonada en el año 1994 con el Premio Sor Juana Inés de la Cruz, distinción concedida a la mejor novela hispanoamericana escrita por mujeres, Para que no me olvides (1993) obtuvo en 1994 el Premio Municipal de Literatura en Santiago de Chile, y Antigua vida mía (1995), obtuvo un éxito sin precedentes de crítica y público en aquellos países en que se ha editado. Actualmente vive en México.