Primera parte: Pequeño tratado de saber vivir para mayor provecho de los habitantes del planeta en general y de los educadores en particular · Segunda parte: Descubrir el mundo en el día a día · Tercera parte: Perspectivas para una política educativa
Con apariencia de seriedad o quitándole importancia, por todas partes se juega a todo: a la bolsa, a la escuela o a la guerra, a la seducción o a la destrucción, pero, eso sí, dejando tras de sí cadáveres de verdad y seres humillados o amargados. Y es que si bien un niño descubre el mundo jugando, jugando, un adulto lo destruye. Ya empieza a ser urgente guiar a niños y adolescentes en su aproximación al mundo para llevarles a que descubran la fragilidad de los demás y a que resistan a la tentación de la prepotencia y, con ello, prepararles para luchar contra la hegemonía del juguete que es también la del desprecio y la violencia. Sí, hacen falta referencias educativas claras y también un proyecto político serio Primera parte: Pequeño tratado de saber vivir para mayor provecho de los habitantes del planeta en general y de los educadores en particular · Segunda parte: Descubrir el mundo en el día a día · Tercera parte: Perspectivas para una política educativa