Una mujer, un niño y una gata conviven en una cabaña en pleno bosque, calladamente la mayor parte del tiempo, pues el niño apenas habla. No tienen contacto con nadie, excepto por las visitas de un hombre que les trae provisiones de vez en cuando. No son familia, pero juntos salen adelante. Fuera, la naturaleza se está volviendo impredecible: el paisaje deslumbrante que rodea a los protagonistas adquiere a veces matices siniestros. Ellos subsisten con lo que obtienen de un huerto que cada vez da menos frutos, y con lo que consiguen del bosque inmediato. A lo lejos, en las ciudades, parece que también hay extrañas turbulencias, cuya amenaza se proyecta sobre la cabaña. José Ovejero nos presenta a estos personajes solitarios, sin alma de héroes, y nos hace reflexionar sobre el sentido de la vida, los lazos que nos unen a las personas de nuestro entorno y la capacidad de sobrevivir en situaciones adversas.
José Ovejero (Madrid, 1958) vive a caballo entre Madrid y Bruselas, donde combina su pasión por la literatura con las colaboraciones periodísticas. Desde que ganara el Premio Ciudad de Irún 1993 con su poemario Biografía del explorador, ha cultivado todos los géneros, siendo especialmente reseñables su libro de viajes China para hipocondríacos, merecedor del Premio Grandes Viajeros 1998, y su novela Las vidas ajenas, ganadora del Premio Primavera 2005. Desde su primer galardón hasta el último, el autora ha continuado cultivando el género narrativo con novelas como Añoranza del héroe (1997), Huir de Palermo (1999) y Un mal año para Miki (2003), con libros de relatos como Cuentos para salvarnos a todos (1996), Qué raros son los hombres (2000) y Mujeres que viajan solas (2004), y con ensayos como Bruselas (1996).