¿Asistimos al ocaso de la cocina doméstica y al imparable declive de la cultura gastronómica mediterránea? ¿Es la macdonalización de los hogares e incluso de los grandes restaurantes un proceso imparable? ¿Debemos sentirnos orgullosos de una cocina, la molecular o tecnoemocional abanderada por Ferran Adrià y su cohorte de seguidores , que llena nuestros platos de gelificantes, estabilizantes y emulsionantes de laboratorio? A éstas y otras preguntas intenta dar respuesta Santi Santamaría, el cocinero español con más estrellas Michelin, en un libro atípico y sugerente, sin recetas mágicas, salpicado de recuerdos y referencias personales y profesionales, escrito al margen de las modas imperantes y contra la cocinaespectáculo por alguien que lleva toda la vida pegado a los fogones y que, por encima de todo, siente un extraordinario amor por la cocina mediterránea. Con él se pretende estimular el diálogo, abrir un debate público sobre el futuro de nuestra gastronomía y agitar las conciencias de una anestesiada ciudadanía que, en muchos casos, y en opinión del autor, parece haber renunciado a la calidad y al gusto por la comida.
Santi Santamaria nació en Sant Celoni (Barcelona) en 1957. En 1981 inauguró, junto a su esposa Àngels, El Racó de Can Fabes, que recibió en 1988 su primera estrella en la guía Michelin y una segunda estrella en 1990. Ese mismo año ingresó en la asociación Relais y Châteaux y en 1993 en Traditions y Qualité. En 1994 consiguió la tercera estrella Michelin, siendo el primer chef catalán merecedor de tal distinción. Tras publicar La cocina de Santi Santamaria (1999) y El mundo culinario de Santi Santamaria (2001), inició en 2001 una colaboración semanal en el magacin de La Vanguardia. Ese mismo año, su restaurante Santceloni de Madrid se hizo con la primera estrella Michelin y en 2005 consiguió la segunda. Otros títulos publicados: La cocina es bella (2003), El restaurante (2004), Entre llibres i fogons, Palabra de cocinero (ambas en 2005). En 2006 inauguró su primer establecimiento en el área metropolitana de Barcelona, el restaurante Evo, en el hotel Hesperia Tower de l?Hospitalet, que pronto recibió una estrella Michelin. Ha recibido varios premios de prestigio internacional.