No hay nadie en casa es un seductor híbrido de géneros, compuesto de artículos, de viñetas y ensayos, de relatos de lo vivido y de lo pensado, un vasto paseo por literaturas, vidas, ciudades e ideologías. Agudo, inteligente, conmovedor en ocasiones, se lee con la rapidez y avidez de las grandes novelas. Todo un mundo, familiar y extraño a la vez, se despliega en este libro pleno de iluminaciones, de perspectivas únicas sobre la literatura, la geopolítica, el Este y el Oeste. Porque Ugresic es una escritora que no se pone límites ni se fija coordenadas. que explora todo el espectro y maneras de nuestro existir, y que tiene un ojo más que clínico para las paradojas, las falsas verdades, las realidades curiosas. Un ojo clínico y crítico que nunca falla al descubrir lo que ocultan los usos sociales y las costumbres, lo trágico, lo insólito, lo cómico de la cotidianeidad. «Ugresic es como el Baudelaire de Walter Benjamin, el poeta transeúnte que se abandona a los caprichos de la multitud» (Nicole Rudick, Bookforum). «Una escritora a seguir, y a admirar» (Susan Sontag).
Nació en 1949 en Kutina, un pueblecito cercano a Zagreb. Tras estallar la Guerra de los Balcanes, se exilió de su país. Desde entonces ha enseñado en numerosas universidades de Europa y América, como Harvard, Columbia y la Free University de Berlín. Entre sus obras, que han sido traducidas a numerosos idiomas, destacan «El museo de la rendición incondicional» (1996) y «Baba Yaga puso un huevo» (2008), que será publicado próximamente por Impedimenta, así como los ensayos «Gracias por no leer» (2003) y «Karaoke Culture» (2010), que quedó finalista del National Book Critics Circle Award en 2011. También ha recibido el Premio del Estado Austriaco a la Literatura Europea (1998), galardón que han distinguido a otros autores como Stanislaw Lem, Marguerite Duras o Mircea Cartarescu, y en 2009 quedó finalista del Premio Booker. Actualmente reside en Ámsterdam.