Díaz Eterovic nos da la posibilidad de reencontrarnos con su personaje más carismático: el solitario y marginal detective Heredia. En esta ocasión, este antihéroe de la novela negra se desplaza hasta Punta Arenas para intentar resolver unas extrañas muertes a petición de un antiguo compañero universitario. Lejos de su barrio y de sus amistades habituales, Heredia recurre a nuevas compañías y busca consuelo en los brazos de Yasna Matic, una hermosa mujer empeñada en enamorar al forastero que ha llegado a golpear la puerta de su casa. Como es habitual en la obra del autor, en esta historia se combinan acertadas y convincentes atmósferas entrelazadas con un personal estilo que destaca por su ironía y humor.