Poemas de exilio, de soledad y de oración es una amplia antología donde se selecciona la obra de Ernestina de Champourcin desde su primer libro, En silencio (Madrid, 1926), hasta Huyeron todas las islas (Madrid, 1988). Es la suya una obra que trata de la condición humana desde una perspectiva individual y emotiva. Una poesía que se comporta como un acto gradual de descubrimiento personal, pero que pretende desde lo subjetivo, desde la vivencia más íntima y personal, abordar cuestiones metafísicas (vida-amor-muerte-Dios) que, alejándola de un inútil confesionalismo, le permiten expresar el significado esencial del vivir humano. Nunca renuncia a comunicarnos su personal visión de la realidad que ha ido configurando a través del poema, verdadero instrumento de su proceso de conocimiento, y por eso, porque se trata de un complejo aprendizaje, nos implica en el camino y su indagación existencial es pauta ara nuestra propia interrogación existencial. Porque, a lo largo de tanta vida y tantos libros, la poeta ha pretendido una y otra vez hallar su propia identidad, y su poesía representa precisamente esta búsqueda apasionada de sí misma, representa una lucha por afirmarse a través de la palabra, de tal manera que el poema es el vehículo de su búsqueda de sentido.