Toda la poesía de Borges en un solo volumen. Además de extraordinario narrador y ensayista, Borges fue un excelente poeta. De hecho, puede decirse que la poesía es el alma de su obra. Indisociables de sus cuentos y ensayos, estos poemas son parte indispensable del universo borgiano y constituyen una indagación paralela a los temas que siempre le apasionaron: los libros, la memoria, los laberintos, los espejos, Inglaterra, el amor o la eternidad. Dueño de un fino oído y una deslumbrante capacidad para crear imágenes memorables, Borges revive en sus grandes poemas la intensidad que recorre la gran tradición occidental desde Homero hasta Eliot. Antes que el sueño (o el terror) tejiera mitologías y cosmogonías, antes que el tiempo se acuñara en días, el mar, el siempre mar, ya estaba y era. ¿Quién es el mar? ¿Quién es aquel violento y antiguo ser que roe los pilares de la tierra y es uno y muchos mares y abismo y resplandor y azar y viento? Quien lo mira lo ve por vez primera, siempre. Con el asombro que las cosas elementales dejan, las hermosas tardes, la luna, el fuego de una hoguera. ¿Quién es el mar, quién soy? Lo sabré el día ulterior que sucede a la agonía. Reseña:
«Borges es mejor poeta que narrador. Su obra completa en verso ha sido editada en un tomo maravilloso y sin desperdicio, en el que no podía faltar el poema que inicia con el endecasílabo más perfecto de la historia de la literatura en nuestro idioma: "ya no seré feliz. Tal vez no importa".»
Benjamín Prado, La Ventana (Cadena SER)
Jorge Luis Borges (Buenos Aires, 1899 - Ginebra, 1986) es el más grande escritor argentino y uno de los autores fundamentales del siglo xx. Ha escrito libros de poesía, ensayos y cuentos. Deliberadamente evitó la novela. Dentro de su obra poética destacan Fervor de Buenos Aires (1923), Luna de enfrente (1925), Cuaderno de San Martín (1929), El otro, el mismo (1954) y La cifra (1981). Entre sus libros de cuentos pueden citarse Historia universal de la infamia (1935), Ficciones (1944), El Aleph (1949) y El informe de Brodie (1970). Sus célebres ensayos incluyen títulos como Evaristo Carriego (1930), Discusión (1932) y Otras inquisiciones (1952). Ha escrito libros en colaboración con Adolfo Bioy Casares y otros autores, y ha realizado admirables traducciones.
Su obra ha ensanchado los límites de la lengua española y ha influido de manera decisiva en la literatura contemporánea.