La liberalización de la propiedad, en su doble vertiente desamortizadora y redentora de censos, es uno de los acontecimientos clave de la revolución liberal en España. El objeto de la presente obra es profundizar en la primera fase de este proceso, cuando las necesidades financieras del estado obligaron a Carlos IV a desamortizar y redimir censos para sanear la hacienda. Para ello, desde una perspectiva microhistórica (no localista), y utilizando la dicotomía centro (Madrid) y periferia (Canarias), se construye una visión polémica y humana del proceso, que ofrece un modelo útil para otras aproximaciones similares.