Reunidos, por primera vez, todos los textos en prosa de la mítica poeta argentina Alejandra Pizarnik.En el prólogo a esta Prosa completa de la mítica poeta argentina Alejandra Pizarnik, Ana Nuño nos habla de este libro imprescindible y esperadísimo en los siguientes términos: «El interés que presenta esta edición, respecto del ominoso imperativo de la novedad editorial, es triple: ofrece una ordenación cronológica de un material que en su momento fue recogido en volumen, tanto en Argentina como en España; rescata textos, sobre todo, más nos exclusivamente, de crítica literaria de la autora, publicados originalmente en revistas literarias de difícil consulta, y da a leer este conjunto como un todo, lo que le permite subrayar la coherencia y correspondencias múltiples entre prosa de creación y prosa ensayística, por un lado, y, por otro, entre el conjunto de la prosa y la obra poética.«Conviene destacar dos aspectos de la prosa de Pizarnik. Los relatos, en primer lugar, cuajados de motivos y figuras recurrentes en la obra poética: la seducción y la nostalgia imposibles, la tentación del silencio, la escritura concebida como espacio ceremonial donde se exaltan la vida, la libertad, y la muerte, la infancia y sus espejismos, los espejos y el doble amenazador... Importa menos, en este sentido, la extensión de los relatos que la intensa concentración en ellos de un trabajo de escritura que busca exaltar los poderes del lenguaje. Éste es -y no la muerte o la locura o el suicidio- el gran motor de la obra de Pizarnik.»
Alejandra Pizarnik nació en Buenos Aires en 1936 en una familia de inmigrantes judíos de origen ruso y eslovaco.
Publicó su primer libro, titulado La tierra más ajena, en 1955. Le siguieron La última inocencia en 1956 y Las aventuras perdidas en 1958.
Entre 1960 y 1964 se instaló en París y ahí colaboró con distintas revistas y diarios. De esa época procede su amistad con Julio Cortázar, Rosa Chacel y Octavio Paz, quien prologó su cuarto poemario, titulado El árbol de Diana (1962).
En 1964 regresó a Buenos Aires y publicó sus obras más conocidas: Los trabajos y las noches (1965), Extracción de la piedra de la locura (1968) y El infierno musical (1971). Desde 1954 en adelante, Pizarnik fue redactando sus Diarios (Lumen, 2013) que la acompañaron hasta los últimos días de su vida. Lumen también ha publicado su Prosa completa (2016).
En 1972, a la edad de treinta y seis años, decidió morir en la misma ciudad donde había nacido.