Tanto El pensamiento el corazón» (1981) como «Anima mundi: el retorno del alma al inundo» el retorno del alma al mundo (1982) constituyen dos innovadores ensayos que arrojan la psicología logía arquetípica, iniciada por dirección: denomina mina a ésta «psicología profunda de la extroversión», una terapia que va más allá de la consulta y de las concepciones personalistas y que pretende enseñarnos a recuperar una vida del corazón y del alma partiendo del platonismo, Ficino y Henry Corbin. El examen que Hillman desarrolla sintéticamente en su primer ensayo trata de eliminar ideas mecanicistas preconcebidas o personalistas, para mostrarnos que el corazón es el asiento de la imaginación, pues ésta es la auténtica voz del corazón. Una voz que habla siempre imaginativamente, ya que su pensamiento se expresa a través de sus imágenes. Para Hillman, el conocimiento del mundo no debe olvidar la «inteligencia del corazón» si quiere describir el mundo fielmente. Con la brillantez intelectual que le caracteriza, Hillman, en su segundo ensayo, destaca la urgencia de hacer retornar el alma al mundo para, de este modo, sentirnos parte de él y así poder establecer con el mundo una relación más íntima y a la vez más profunda.
Sigmund Freud (1856-1939) fue un médico y neurólogo austriaco, creador del psicoanálisis y una de las mayores figuras intelectuales del s. XX. Su interés científico inicial como investigador se centró en el campo de la neurología, derivando progresivamente sus investigaciones hacia la vertiente psicológica de las afecciones mentales, de la que daría cuenta en su práctica privada. Estudió en París con el neurólogo francés Jean-Martin Charcot las aplicaciones de la hipnosis en el tratamiento de la histeria. De vuelta en Viena y en colaboración con Joseph Breuer desarrolló el método catártico. Paulatinamente, reemplazó tanto la sugestión hipnótica como el método catártico por la asociación libre y la interpretación de los sueños. De igual modo, la búsqueda inicial centrada en la rememoración de los traumas psicógenos como productores de síntomas, fue abriendo paso al desarrollo de una teoría etiológica de las neurosis más diferenciada. Todo esto se convirtió en el punto de partida del psicoanálisis, al que se dedicó ininterrumpidamente el resto de su vida. Freud postuló la existencia de una sexualidad infantil perversa polimorfa, tesis que causó una intensa polémica en la sociedad puritana de la Viena de principios del siglo XX y por la cual fue acusado de pansexualista. A pesar de la hostilidad que tuvieron que afrontar sus revolucionarias teorías e hipótesis, Freud acabaría por convertirse en una de las figuras más influyentes del siglo XX.