En un mundo dominado por imágenes, en la era de Instagram y las pantallas omnipresentes, los estudios visuales nos resultan cada vez más vitales. Desde su primera aparición en 2006, "La so(m)bra de lo real" se reveló una obra profética que anticipaba nuestro «ocularcentrismo expandido» a la vez que la necesidad de articular un discurso de resistencia desde la so(m)bra. En este ensayo, el autor de "El dolor de los demás" describe un recorrido por las estrategias más extremas y transgresoras del arte, los «vomitorios» del espectáculo, el lugar por donde se entraba y salía del anfiteatro, para confrontarnos con lo Real. Partiendo del análisis del arte de Lacan, Miguel Ángel Hernández propondrá la «bulimia» y la «anorexia» de la mirada (el exceso y la falta) como estrategias para una dieta perversa del ojo. Ruptura, apófasis, iconoclastia, abyección, ocultación, dolorismo, vaciamiento, evaporación, antivisión prácticas de un territorio en sombra que subvierten y tensionan el espectáculo, y que, paradójicamente, tendrán el poder de devolvernos la capacidad de mirar.
Miguel Ángel Hernández (Murcia, 1977) es profesor de Historia del Arte en la Universidad de Murcia. Ha sido director del CENDEAC (Centro de Documentación y Estudios Avanzados de Arte Contemporáneo) y Research Fellow del Clark Art Institute (Williamstown, Massachusetts). Es autor de los libros de relatos Cuaderno [...] duelo (2011) e Infraleve: lo que queda en el espejo cuando dejas de mirarte (2004). Sus microrrelatos, publicados en la plaquette Demasiado tarde para volver (2008), aparecen en Por favor, sea breve 2 (2009) y Antología del microrrelato español (1906-2011) (2012). Entre sus libros de ensayo y crítica de arte destacan Materializar el pasado. El artista como historiador (benjaminiano) (2012), Robert Morris (2010), La so(m)bra de lo Real: el arte como vomitorio (2006) y la edición de Art and Visibility in Migratory Culture (2012, con Mieke Bal). Colabora regularmente con varias revistas nacionales e internacionales de arte y cultura visual y, desde 2006, mantiene el blog No(ha)lugar (nohalugar.blogspot.com). Sobre su narrativa se ha escrito: «Una sensibilidad espléndida y unos ecos narrativos ?Blanchot, Beckett, Bernhard? de primerísimo orden» (Ricardo Menéndez Salmón, Numerocero.es); «Hay pensamiento y humanidad, unas páginas donde la ambición se ha visto largamente recompensada por el logro» (Javier Moreno, Quimera); «Un texto de altísimo valor literario, sugerente, vigoroso, repleto de lirismo» (José Belmonte, Ababol).