Por esta razón, el Tao Te King es un libro para quienes no confían en las palabras y desean ir mucho más allá de lo verbalmente expresable. Un compañero imprescindible que, como el vino añejo, cambia y mejora con el paso del tiempo y destila nuevos sabores, impensados perfumes y pensamientos no descubiertos. Considerado como uno de los grandes libros sagrados de la humanidad, el Tao Te King no expone una religión o una filosofía, sino toda una manera de pensar y de vivir la vida en armonía con la naturaleza, con el Cielo y con la Tierra. AUTOR Aunque no está claro cuánto hay de cierto y cuánto de legendario en la figura de Lao Tsé, su obra es considerada como la de uno de los filósofos más relevantes de Oriente. De hecho, los ideogramas que forman su nombre ( ) poseen el significado de ?anciano? y ?erudito?. La tradición dice que vivió en el siglo VI a.C., y que en esa época concibió el texto fundacional del taoísmo.
Lao Tsé no fundó ninguna escuela, al contrario de lo que hizo Confucio. No sentía ni el deseo ni la necesidad de hacerlo. Porque no tenía la intención de difundir una doctrina. Vislumbró para sí las grandes conexiones universales, y vertió dificultosamente lo visto en palabras, abandonando a otros espíritus afines de épocas posteriores la tarea de seguir independientemente sus indicaciones, y contemplar por sí mismos el conjunto del mundo, las verdades que había descubierto. Y lo consiguió. En todos los tiempos han existido pensadores que levantaron la vista por encima de los fenómenos pasajeros de la vida humana, hacia el sentido eterno del proceso cósmico, cuya grandeza desafía toda conceptualización.