Tao Te Ching es una de las escrituras más importantes del taoísmo, que es una de las tres grandes filosofías chinas junto con el confucianismo y el budismo. Es una colección de 81 textos breves que abordan aspectos tanto ontológicos como éticos de la vida. Analiza cómo funciona el mundo, pero también cómo las personas actúan "bien" en la vida. El primer capítulo comienza con la palabra Tao que significa "el Camino", el segundo capítulo con Te que significa "virtud, valor, integridad". Lo central del Tao Te Ching es "seguir el Tao" y Wu wei, "no intervenir, dejar ir", es decir, no resistirse al curso de las cosas, sino seguirlo espontáneamente.
Lao Tsé no fundó ninguna escuela, al contrario de lo que hizo Confucio. No sentía ni el deseo ni la necesidad de hacerlo. Porque no tenía la intención de difundir una doctrina. Vislumbró para sí las grandes conexiones universales, y vertió dificultosamente lo visto en palabras, abandonando a otros espíritus afines de épocas posteriores la tarea de seguir independientemente sus indicaciones, y contemplar por sí mismos el conjunto del mundo, las verdades que había descubierto. Y lo consiguió. En todos los tiempos han existido pensadores que levantaron la vista por encima de los fenómenos pasajeros de la vida humana, hacia el sentido eterno del proceso cósmico, cuya grandeza desafía toda conceptualización.